Friday, July 14, 2006

El lugar de encuentro entre Dios y el hombre

A diario vemos un mundo surcado por guerras y muertes. En este contexto, me ha llamado la atención una frase de Benedicto XVI: “El cuerpo crucificado de Jesucristo, que extiende las manos al mundo entero, es el lugar donde se encuentran Dios y el hombre”. Las tragedias provocan con frecuencia perplejidad a nuestra inteligencia y rechazo a nuestros sentimientos. Pero el hermanamiento histórico de Dios con los más desventurados hace que la fe cristiana ofrezca una respuesta sólida y llena de sentido al problema del dolor, haciendo que este mundo mutilado sea sanado y elevado por la lógica mesiánica de la cruz y la resurrección.

José Ignacio Moreno Iturralde

1 comment:

Jose Menchon said...

Misterio grandioso que nos llena de paz, esperanza y alegria.