Sunday, October 30, 2005

Nuevo Blog sobre cuestiones de actualidad

Todos los santos

Miguel Delibes ha escrito sobre el gran peso específico de los difuntos comparados con los vivos. Ellos son biografías acabadas, han concluido su camino en este mundo y han decidido su futuro eterno. Tengo la inmensa suerte de contar entre mis seres queridos ya fallecidos con una gran mayoría de personas que han sido fieles a Dios, a su familia y a su sociedad. Esta fidelidad no ha sido fácil; en algunos momentos quizás fue dura o muy dura, pero siempre satisfactoria con la paz que da al alma el cumplir con los propios deberes. Pienso que muchos de estos fallecidos han tenido un telón de fondo de realismo, sencillez y gratitud; han gozado con ser una persona más de este mundo, conscientes de la trascendencia cristiana de sus vidas. Es verdad que recuerdo también alguna biografía humanamente malograda, incluso difícilmente comprensible y eso hace que tenga que dejar, especialmente, en manos de Dios a algunos por los que ahora tan solo puedo rezar, que no es poco.

La vida de todos mis familiares y amigos difuntos se me presenta breve, con etapas de felicidad, más o menos acusada, que engarzan su sentido con el nervio de la eternidad. Realmente afirmar la eternidad es lo mismo, entre otras cosas, que afirmar la entidad y el valor del pasado; y, por tanto, del presente y del futuro. El recuerdo entrañable, más o menos impreso o borrado por el otoño del viento, reclama su culminación en el eterno presente de Dios para poder hablar de dignidad en la vida humana.

Hay sin embargo, desde mi muy limitado punto de vista, algunas personas que han sobresalido por su capacidad de querer, por su generosidad y alegría. Estoy seguro que han tenido fallos, pero pienso que tampoco se han detenido excesivamente en ellos porque sabían mirar hacia fuera y percatarse de las necesidades de los demás y de la Voluntad de Dios. En ellas encuentro el recuerdo de lo grato, de lo pocholo y de lo valiente, aunque fueran mujeres y hombres que hayan tenido sus batallas interiores de superación, sin las cuáles quizás habría sido imposible todo lo grato y atractivo de sus vidas. Este gozo por vivir y vivir en gracia de Dios y con gracia humana hacen de estas personas excepcionalmente normales faros de luz, motivo de aumento de la fe y estabilizadores del ánimo.

En el momento actual existe, como es evidente, una gran desorientación respecto al sentido de la existencia y respecto a la humanidad de las costumbres. La epidemia que se cierne sobre el respeto a la vida humana no nacida y a la entidad de la familia está provocando mucha infelicidad y confusión. Pero Dios siempre ha escrito derecho con renglones torcidos y la protección de su Madre y Madre nuestra es más poderosa que mil infiernos. Por esto me atrevo a sugerir que no sólo seamos cumplidores de nuestras obligaciones sino que nos dispongamos a entrar en la forja purificadora del Amor a Dios y a los demás. Aunque el panorama parezca oscuro y frío nuestras vidas podrán ser sino como castillos de fuegos en la noche al menos como luces de hogar para la familia humana, un modo que el propio Señor eligió para vivir e iluminar al mundo.
José Ignacio Moreno Iturralde

Wednesday, October 12, 2005

Divina Misericordia


“Hoy he visto la Gloria de Dios que se propaga de esta imagen. Muchas almas reciben Gracias, aunque no lo digan en alta voz. Si bien sus vicisitudes sean diversas, Dios recibe gloria por su intermedio y los esfuerzos de satanás y de los hombres alvados se estrellarán y serán aniquilados. A pesar de la rabia de satanás la Divina Misericordia triunfará en el mundo entero y tendrá el culto de todas las almas”

Santa María Faustina Kowalska.

(enlace en título del post)

Palabras de Juan Pablo II: "Mi vida por Cristo"


“Cuando pienso en el mundo que se apaga y se muere por la falta de Cristo…

Cuando pienso en el caos profundo en que se desbarranca la inquieta humanidad por la falta de Cristo…

Cuando me encuentro con la fuerza de la juventud, marchita y destrozada, en la primavera misma de la vida, por la falta de Cristo…


No puedo ahogar las quejas de mi corazón, quisiera multiplicarme, dividirme…para escribir, predicar, enseñar a Cristo.

Y del fondo mismo de mi espíritu brota un contundente y único grito: ¡MI VIDA POR CRISTO!

Juan Pablo II-Diciembre 2002

Tuesday, October 04, 2005

Novena a San Josemaría


Mons. Juan Larrea Holguín

Edición a cargo del Dr. Joaquín Monrós Guitart

Publicaciones de Empresa&Humanidades

CONTENIDO DE LOS DÍAS:

LA SANTIFICACIÓN DEL TRABAJO
SANTIFICACIÓN DEL HOGAR Y LA FAMILIA
SANTIFICACIÓN DEL MUNDO
NUESTRO FUNDAMENTO: SOMOS HIJOS DE DIOS
LA UNIDAD DE VIDA
PROGRESAR EN VIRTUDES
ENSEÑAR LA DOCTRINA CRISTIANA
MEDIOS PARA SER FIELES
CRISTO, MARÍA Y LA IGLESIA
Folleto de 48 págs., con fotografías en color y en blanco y negro. Tamaño: 15cm. x 10,5cm. P.V.P. 2,50 Eu.

Existe la posibilidad de recibirlo formando parte de un
kit, en una bolsita de plástico transparente, que contiene una medalla de San Josemaría en baño de plata al precio de 3,50 Euros el kit.

PEDIDOS E INFORMACIÓN
CASABLANCA COMUNICACIÓN
arvo@arvo.net
http://www.casablan.org/
Tfno.: 923.26.13.03 - Fax.: 923.21.65.11