Wednesday, January 25, 2006

Virge, Madre, Cruz



Por la Cruz redentora la Virgen fue Madre del Niño. La virginidad y la maternidad son dos caras de la moneda de la Cruz; es decir: del Amor.


José Ignacio Moreno Iturralde

Nueva Encíclica "Deus Caritas est"

Saturday, January 21, 2006

La esfera y la cruz

Dicen algunos físicos que el espacio es curvo y cerrado. Si fuera así, una cruz ingrávida y alargada indefinidamente, en sus cuatro puntos cardinales, sería el armazón de la esfera o elipse de volumen del cosmos. En otra visión más convencional podríamos decir que la esfera del mundo se puede ver coronada por una cruz; siendo lo contrario algo absurdo, como afirma Chesterton. Pero, sea como fuere, la cruz pincha el yo hinchado y lo abre a la ventana de la realidad y de la luz.



José Ignacio Moreno Iturralde

Monday, January 16, 2006

Regale zenit

Quedan sólo tres días para regalar Zenit y tener la oportunidad de ganar el viaje de una semana a Tierra Santa y otros premios!Desde el inicio de la campaña, el pasado 5 de diciembre, más de 130.000 personas en todo el mundo han recibido una "suscripción-regalo" a Zenit.Este resultado no sería posible sin la movilización de todos ustedes, queridos lectores. ¡Muchas gracias!Como siempre, la velocidad de crecimiento del número de "regalos" en estos últimos días de campaña es impresionante.Puede seguir la campaña EN TIEMPO REAL desde nuestra página web:http://www.zenit.org/spanish¡La meta de 150.000 "suscripciones-regalo" que nos hemos fijado está muy cerca!¡Si tiene pendiente revisar su agenda de correos electrónicos, todavía está a tiempo de hacerlo!Este pequeño gesto por su parte, algunos minutos de su tiempo, puede transformarse en algo que le agradecerán mucho sus familiares, amigos o conocidos, quienes estarían muy satisfechos de empezar a recibir Zenit.Zenit es gratis para uso personal. Para regalar Zenit en español, sólo hay que hacer clic en:http://www.zenit.org/spanish/regalo.htmlReciba un saludo muy cordial,Carmen LagoAgencia ZENIT

Saturday, January 14, 2006

Carta del Prelado del Opus Dei sobre la familia

Consejos del Papa a los jóvenes para que conozcan a Cristo

Consejos del Papa a los jóvenes para que conozcan a Cristo. Mensaje a la jornada nacional de la juventud católica de Holanda CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 13 enero 2006 (ZENIT.org).- Publicamos el mensaje que dirigió Benedicto XVI a los jóvenes de Holanda con ocasión de la primera Jornada Nacional de los Jóvenes Católicos (Cf. Zenit, 21 de diciembre de 2005)

Queridos jóvenes amigos: Deseo enviaros mi cordial saludo a todos vosotros, reunidos en Nieuwegein para la primera Jornada nacional de los jóvenes católicos de Holanda. Saludo al cardenal Adrianus Simonis, arzobispo de Utrecht y presidente de la Conferencia episcopal, y a todos los obispos holandeses, expresando mi profundo aprecio por la realización de esta feliz iniciativa. Asimismo, deseo dar las gracias al "Werkgroep Katholieke Jongeren" por el esfuerzo realizado durante estos años, y a los sacerdotes y laicos comprometidos en la pastoral juvenil, que os acompañan en vuestra reflexión. A través de este mensaje, queridos jóvenes, deseo hacerme presente espiritualmente en medio de vosotros y aseguraros que os acompaño en la oración. Sé que muchos de vosotros habéis participado en el encuentro mundial de Colonia, y es para mí motivo de gran alegría el hecho de que ahora queráis proseguir la experiencia iniciada con la Jornada mundial de la juventud, facilitando la participación de otros coetáneos vuestros que no tuvieron la posibilidad de asistir.

Celebrar la jornada de hoy por invitación de vuestros obispos es un signo muy hermoso para la sociedad holandesa: muestra que no tenéis miedo de proclamar que sois cristianos y queréis testimoniarlo abiertamente. En efecto, la razón más profunda de vuestra reunión es encontraros con nuestro Señor Jesucristo. Así fue para los que participaron en la reciente Jornada mundial de la juventud, que tuvo por tema: "Hemos venido a adorarlo" (Mt 2, 2). Tras las huellas de los Magos, animados por el anhelo de averiguar la verdad, jóvenes de todos los rincones de la tierra se dieron cita en Colonia para buscar y adorar al Dios hecho hombre, y después, transformados por el encuentro con él e iluminados por su presencia, volvieron a su país, como los Magos, "por otro camino" (cf. Mt 2, 12). Así también vosotros volvisteis a Holanda deseosos de comunicar a todos la riqueza de la experiencia vivida, y hoy queréis compartirla con vuestros coetáneos. Queridos amigos, Jesús es vuestro verdadero amigo y Señor; entablad una relación de verdadera amistad con él. Él os espera y sólo en él encontraréis la felicidad. ¡Cuán fácil es contentarse con los placeres superficiales que nos ofrece la existencia diaria! ¡Cuán fácil es vivir sólo para sí mismos, gozando aparentemente de la vida! Pero antes o después nos damos cuenta de que no se trata de verdadera felicidad, porque esta es mucho más profunda: sólo la encontramos en Jesús. Como dije en Colonia, "la felicidad que buscáis, la felicidad que tenéis derecho de saborear, tiene un nombre, un rostro: el de Jesús de Nazaret" (Discurso durante la fiesta de acogida de los jóvenes, en un barco sobre el Rhin, 18 de agosto de 2005: L'Osservatore Romano, edición en lengua española, 26 de agosto, p. 4). Por eso os invito a buscar cada día al Señor, que sólo desea que seáis realmente felices. Entablad con él una relación intensa y constante en la oración y, en la medida de vuestras posibilidades, encontrad momentos propicios en vuestra jornada para permanecer exclusivamente en su compañía. Si no sabéis cómo rezar, pedid que sea él mismo quien os lo enseñe e implorad a su Madre celestial que ore con vosotros y por vosotros. El rezo del rosario puede ayudaros a aprender el arte de la oración con la sencillez y la profundidad de María. Es importante que en el centro de vuestra vida esté la participación en la Eucaristía, en la que Jesús se entrega a sí mismo por nosotros. Él, que murió por los pecados de todos, desea entrar en comunión con cada uno de vosotros, llama a la puerta de vuestro corazón para daros su gracia. Id a su encuentro en la santa Eucaristía, id a adorarlo en las iglesias y permaneced arrodillados ante el Sagrario: Jesús os colmará de su amor y os manifestará los sentimientos de su Corazón. Si os ponéis a la escucha, experimentaréis de modo cada vez más profundo la alegría de formar parte de su Cuerpo místico, la Iglesia, que es la familia de sus discípulos congregados por el vínculo de la unidad y del amor. Además, como dice el apóstol san Pablo, aprended a dejaros reconciliar con Dios (cf. 2 Co 5, 20). Jesús os espera especialmente en el sacramento de la Reconciliación para perdonar vuestros pecados y reconciliaros con su amor a través del ministerio del sacerdote. Confesando con humildad y verdad vuestros pecados, recibiréis el perdón de Dios mismo mediante las palabras de su ministro. ¡Qué gran oportunidad nos ha dado el Señor con este sacramento para renovarnos interiormente y progresar en nuestra vida cristiana! Os recomiendo que hagáis constantemente buen uso de él.

Queridos amigos, como os decía antes, si seguís a Jesús jamás os sentiréis solos, porque formáis parte de la Iglesia, que es una gran familia, en la que podéis crecer en la amistad verdadera con numerosos hermanos y hermanas en la fe, esparcidos por todo el mundo. Jesús os necesita para "renovar" la sociedad actual. Esforzaos por crecer en el conocimiento de la fe, para ser sus testigos auténticos. Dedicaos a comprender cada vez mejor la doctrina católica: aunque a veces al mirarla con los ojos del mundo pueda parecer un mensaje difícil de aceptar, en ella está la respuesta satisfactoria a vuestros interrogantes de fondo. Tened confianza en los pastores que os guían, obispos y sacerdotes; insertaos activamente en las parroquias, en los movimientos, en las asociaciones y comunidades eclesiales, para experimentar juntos la alegría de ser seguidores de Cristo, que anuncia y da la verdad y el amor. Y precisamente impulsados por su verdad y su amor, junto con los demás jóvenes que buscan el sentido verdadero de la vida, podréis construir un futuro mejor para todos. Queridos amigos, estoy cerca de vosotros con la oración, para que acojáis generosamente la llamada del Señor, que os presenta grandes ideales, capaces de hacer hermosa vuestra vida y llenarla de alegría. Estad seguros de que sólo respondiendo positivamente a su llamada, por exigente que os pueda parecer, es posible encontrar la felicidad y la paz del corazón. Que en este itinerario de compromiso cristiano os acompañe la Virgen María y os ayude en todos vuestros buenos propósitos. Con estos sentimientos, os imparto de corazón una especial bendición apostólica a todos los que os halláis reunidos en Nieuwegein, así como a los que con amor y sabiduría os acompañan en vuestro camino de crecimiento humano y espiritual.

Vaticano, 21 de noviembre de 2005 [Traducción distribuida por la Santa Sede] ZS06011320

Friday, January 13, 2006

El Opus Dei y el Código Da Vinci

El Opus Dei y la próxima película sobre el Código Da Vinci «Vamos a convertir el limón en limonada», afirma un portavoz de la Obra ROMA, jueves, 12 enero 2006 (ZENIT.org).
- ¿Cuál será el acontecimiento más destacado del año 2006? Según una portada de la edición estadounidense de la revista «Newsweek» el gran evento será la millonaria producción cinematográfica «El Código da Vinci». Por primera vez, en esta entrevista, un representante del «malo de la película», la prelatura del Opus Dei, ofrece su visión sobre esta producción, que Sony-Columbia presentará en mayo con Tom Hanks y Audrey Tautou como protagonistas.
Marc Carroggio, responsable de la relación del Opus Dei con los medios internacionales, reconoce a Zenit que el libro y la actual expectativa «están resultando una especie de publicidad indirecta para nosotros». Carroggio adelanta que ante la película, que ha sido filmada en el Museo del Louvre (en París), no habrá ninguna declaración de guerra contra nadie: se trata de aprovechar el gran interés suscitado para proponer la figura de Jesucristo, subraya. --¿Qué es lo que más les disgusta del libro y ahora de la película? --Carroggio: Ya sé que la ficción tiene sus propias reglas y no hay que tomarla demasiado en serio. Pero, como a cualquier cristiano, me disgusta la frivolidad con que el libro juega con la vida de Jesucristo. Además, el problema de un guión de este tipo es que «criminaliza» a un grupo de personas. Presenta a la Iglesia como una banda de delincuentes que durante dos mil años ha estado dispuesta a todo con tal de mantener escondida una gran mentira. Aunque resulte grotesco, y a veces algo cómico, se acaba ofreciendo un retrato odioso de una institución, y está comprobado que los retratos odiosos generan sentimientos de odio en personas que carecen de recursos críticos. Me parece que no necesitamos más caricaturas de ninguna religión. Tendríamos que estar todos de la parte de la concordia, de la tolerancia, de la comprensión. No se puede pedir la paz con la mano izquierda y golpear con la mano derecha. --El Opus Dei no acostumbra a emitir reacciones oficiales ante acontecimientos. ¿Se hará una excepción con la película del Código da Vinci? --Carroggio: Hay quien está esperando una especie de declaración de guerra, por parte de la Iglesia católica y, dentro de ella, del Opus Dei. Quizá sería interesante para el márketing de la película: ya sabe, un conflicto entre poderes y todo eso. Pero puedo asegurarle que la única respuesta que llegará del Opus Dei será una declaración de paz. Nadie va a formular amenazas, ni promover boicots ni nada parecido.
La verdad es que habríamos agradecido un gesto explícito de respeto de la empresa productora, Sony Columbia. Sin embargo, por su parte sólo ha habido lo que podríamos llamar «amable indiferencia», sin muestras concretas de sensibilidad hacia las creencias religiosas. --¿Cuál piensa usted que será la reacción de las personas del Opus Dei? --Carroggio: La reacción de las personas del Opus Dei será la misma que la de muchos otros cristianos: intentar convertir el limón en limonada. En realidad estamos ante una gran oportunidad de hablar de Jesucristo. Pienso que el interés por la figura de Jesucristo explica en parte la difusión de la novela. Es el típico caso de parasitismo cultural: hacerse famosos polemizando con famosos; presentar la trasgresión como arte. Si no fuera Jesucristo el personaje que está en el centro de la trama de la novela, se desinflaría su interés. Opino que la mejor respuesta es facilitar el conocimiento de Jesucristo, con medios adecuados. Intuyo que este año mucha gente se animará a leer el Evangelio, consultará algún buen libro sobre la vida de Cristo, y quizá se planteará los grandes temas de la fe, que dan luz a las preguntas más difíciles sobre la existencia humana. Para mí, todo esto es convertir el limón en limonada. --En cierto modo Dan Brown ha puesto más de moda el Opus Dei y ustedes tienen la oportunidad de explicarse. ¿Han notado un mayor interés informativo? --Carroggio: Sin duda. En estos meses pasados, sólo en Estados Unidos, más de un millón de personas se han puesto en contacto con nuestro website (http://www.opusdei.org), en parte gracias al revuelo causado por el Código Da Vinci. Está resultando una especie de publicidad indirecta para nosotros. Me viene a la memoria algo que sucedía en los antiguos países comunistas. Si un órgano oficial publicaba un artículo contra la Iglesia, que incluía también ataques al Opus Dei, recibíamos mensajes clandestinos de personas de esos países, que leían los textos al revés, «en negativo»: habían llegado a la conclusión de que el Opus Dei tenía que ser interesante, si era criticado por quienes critican también a la Iglesia católica. Con el Código Da Vinci está ocurriendo algo parecido.
Ya hemos hecho bastante limonada con el libro y esperamos aumentar la producción con la película, Dios mediante. Intentaremos realizar un esfuerzo informativo, ofreciendo plena apertura y disponibilidad: puertas abiertas. Nos gustaría dar, a quienes lo deseen, la oportunidad de conocer el Opus Dei de primera mano. Algo que no han querido hacer ni el autor de la novela ni el director de la película. --¿Llevarán a cabo alguna acción legal contra la película?
--Carroggio: Sinceramente, no lo creo. Desde luego, me parece que habría motivo más que suficiente: imagine que una película revelase que Sony-Columbia no es lo que hasta ahora pensábamos, sino una empresa mafiosa, una secta asesina. No creo que sus abogados se contentasen con un cartel que dijese: no se preocupe, es sólo ficción. Estoy convencido de que amenazarían con una denuncia. Pero también es cierto que un juicio es como el símbolo de un conflicto institucional: daría lugar al «caso Opus Dei versus Sony-Columbia». Me suena irreal. Ya le he dicho que lo único que va a hacer el Opus Dei es una declaración de paz. Para pelear hacen falta dos, y en este caso no habrá quórum. Por otra parte, hay personas del Opus Dei en sesenta países. Algunos de ellos promueven, con sus colegas, centros de formación profesional para campesinos, o para jóvenes sin expectativas de empleo, o también hospitales en zonas deprimidas. Todas esas iniciativas viven gracias al apoyo económico de muchos colaboradores. Es claro que la novela y la película pueden dificultar su labor de recogida de fondos. Por esa razón, no me sorprendería que algunas de esas organizaciones solicitaran indemnizaciones económicas. --¿Van a desaconsejar a los miembros del Opus Dei (más de 80.000 personas en el mundo) esta película, o prefieren que la vean para que se percaten de lo mal que se ha entendido el Opus Dei en algunos círculos? --Carroggio: Los miembros del Opus Dei son adultos. No vamos a hacer nada de ese estilo.
Una cuestión interesante es si esta película no tendría que reservarse solamente a mayores. Cualquier adulto distingue realidad de ficción: basta con un poco de cultura. Pero, ante una manipulación de la historia, a un niño le faltan elementos de juicio: no basta añadir un cartel de «ficción». Así como se les protege de las escenas explícitas de sexo y violencia, ¿no habría que protegerles de la violencia expresada de forma más sutil, y por eso más insidiosa? Me parece razonable sentir esta preocupación. Además de pensar en el beneficio económico, es preciso pensar en la posible influencia negativa sobre los jóvenes. Insisto, no estamos en tiempos de sembrar discordia entre personas, países y religiones, sino de promover la concordia. ZS06011202

Sunday, January 01, 2006

Saberse hijo de Santa María

Hoy, uno de enero, la Iglesia celebra la fiesta de Santa María, Madre de Dios. En honor a la Señora quisiera decir, ahora que comienza el año, lo maravilloso que es intimar en el trato con la Virgen. Con Ella todo se hace más llevadero, más amable, más fácil. San Agustín llama a María “forma Dei”, que traducido libremente significa algo así como "el estilo de Dios". Saberse hijos de tan gloriosa Madre es de vital importancia en la vida del hombre de fe. Muy buenas y provechosas son oraciones como el Rosario, tan lleno de invocaciones cariñosas a Santa María. Pero es posible adentrarse en una imitación de Ella en nuestro día a día; sintonizar con sus ruegos, con su Corazón. Cualquier lector de buena voluntad podría darnos estupendas lecciones. Simplemente quería decir que centrar más, con cuestiones concretas, nuestra vida cristiana en la Virgen María será de gran provecho para nosotros y fuente de alegría para Ella.
José Ignacio Moreno Iturralde