Friday, September 28, 2018

Sucedió en el Colegio Alborada de Alcalá de Henares


Esta mañana, una profesora compañera de trabajo, terminó hasta el último minuto su última clase, pues se jubilaba. Pero hay algo que ella no esperaba: al salir del aula, se encontró todo el pasillo adornado con una alfombra roja, que la homenajeada recorrió con asombro y emoción, al mismo tiempo que unos ciento cincuenta alumnos y alumnas, además de otros muchos profesores, le daban un fortísimo aplauso y un ramo de flores. Que Dios nos siga concediendo profesionales de tanta categoría, y una chavalada tan maja y estupenda.



José Ignacio Moreno

Sunday, September 16, 2018

Vestir con inteligencia


Una persona medianamente madura, conoce sus puntos fuertes y sus debilidades. Se alegra de vivir y de ser como es; al tiempo que es consciente de lo mucho que puede mejorar. Esta idea positiva y modesta de sí misma, le lleva a manifestarse con naturalidad y equilibrio: en la conversación, en la convivencia, y también en el vestido.

Si se vive con modestia, con alegría de vivir y con la convicción de la grandeza y la fragilidad interior, el modo de vestir puede ser atractivo e inteligente. Sería triste una persona que, pudiendo no hacerlo, descuidara su imagen. Pero no es menos equivocado vestir de un modo excesivamente provocativo. De esta manera se pretende exaltar el yo, no se piensa en los demás, y se da una idea errónea y pasajera de la propia identidad.

Puede ser más comprensible que personas jóvenes, más inmaduras, tiendan a vestir provocativamente. Es lamentable la dejación de autoridad que hacen sus padres al respecto. Más triste es aún ver a personas mayores vestir con poca modestia. Por esto, en nuestro panorama social, resulta especialmente atractiva la persona que, señora de su categoría personal, viste con estilo y discreción.

Que cada quien vista como le parezca. Tan solo quiero decir que la modestia es inteligencia, y que vestir inteligentemente nos ayuda a todos a vivir la mejor de las modas: ser mejores personas.



José Ignacio Moreno Iturralde